Ciudad Juárez.- La DEA volvió a incriminar a Rafael Caro Quintero como uno de los líderes del Cártel de Sinaloa, y con ello, la “guerra” desatada para controlar esta frontera en el trasiego de droga.
Fue en Julio de 2016 que Caro Quintero ofreció su primera entrevista a Proceso tras salir del penal de Puente Grande en 2013, donde desmintió a la administración antidrogas de Estados Unidos en relación a seguir en el negocio de las drogas.
A pesar de ello, de acuerdo con un reciente balance nacional elaborado por la Administración de Aplicación de leyes Antidrogas de Estados Unidos (DEA, sus siglas en inglés), Caro Quintero comparte el liderazgo de esta organización con Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera (detenido) e Ismael “El Mayo” Zambada García, que sigue libre.
Así mismo se le atribuye la violencia desatada en Ciudad Juárez debida que el grupo que supuestamente encabeza, se disputa esta plaza al de Juárez y al de Jalisco Nueva Generación.
“Los líderes del Cártel de Sinaloa operando bajo el ala de Joaquín Guzmán Loera, Ismael Zambada García y Rafael Caro Quintero mantienen jefes de células en Phoenix, Arizona, para supervisar la distribución de drogas ilegales en la región”, dice el reporte, que atribuye a este grupo un control total sobre la frontera de Sonora.
“Los jefes de células también coordinan la transportación de drogas ilegales de Phoenix a varias de las ciudades de Estados Unidos”, agrega el texto, difundido anualmente por la DEA.
El mismo documento establece que en este 2017 hay en esta frontera una mayor presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), cuya actividad en Juárez fue reportada por esta dependencia norteamericana desde 2016.
“CJNG trafica drogas ilícitas a los Estados Unidos por el acceso a varios corredores a lo largo de la frontera suroeste, que incluye Tijuana, Juárez y Nuevo Laredo”, dice el documento.
