El Barcelona se dio un banquete en el Camp Nou ante el Girona (6-1), un partido que permite al líder de La Liga dormir con una ventaja momentánea de diez puntos con respecto al Atlético de Madrid, que mañana jugará contra el Sevilla.
Tras un tempranero tanto inicial de Portu (2’), el conjunto azulgrana dejó encarrilado el partido antes del descanso con dos dobletes, de Luis Suárez y Leo Messi. Tras la reanudación, Coutinho se hizo presente (66’) y el uruguayo cerró la goleada (76’).
Después del estresante partido contra el Chelsea, en el que apenas dispuso de ocasiones, jugar con las facilidades que le dio hoy el Girona fue una bendición para el Barça. Ernesto Valverde puso en juego a Coutinho y Dembélé con Messi y Suárez.
Salió el Girona con las líneas muy avanzadas. En la primera jugada de ataque del Girona, Lozano se fue en velocidad y en un balón dividido entre Umtiti y Portu, el delantero rojiblanco fue el más listo, se adelantó y batió a Ter Stegen, al minuto tres.
El Girona siguió con su plan y ese fue su error, porque con espacios, el Barça lo mató en las transiciones, faceta en la que estuvo especialmente lúcido Leo Messi, que anotó dos goles y una asistencia en el primer tiempo.
El partido se equilibró rápidamente, cuando el argentino asistió a Luis Suárez y el uruguayo batió a Bono en el minuto cinco para equilibrar el partido.
A la media hora de juego, Messi regaló una jugada de videojuego al Camp Nou para retratar a Juanpe, Bernardo y Ramalho y marcar el segundo.
El Girona lo intentaba y el Barça se sentía muy cómodo. Antes del descanso, Messi regaló otras dos acciones más de mérito. El argentino marcó de tiro libre (36’) y por debajo de la barrera, en un recurso que el Camp Nou ya había visto en el pasado a Ronaldinho o a Rivaldo; y fue el iniciador de la jugada del 4-1, en la que jugó con Coutinho y éste asistió a Luis Suárez que solo tuvo que empujar el balón (44’).
Pese a que todo estaba decidido, en el segundo tiempo el partido no bajó sus pulsaciones. El objetivo de la delantera era el lucimiento de Dembélé. No marcó el exjugador del Dortmund, pero sí estrenó su casillero de goles Coutinho, un gol muchas veces repetido en la Premier, un recorte desde la izquierda y un balón al palo largo que superó a Bono en el 66.
Antes del final, Dembélé sirvió el 6-1 para que Luis Suárez marcará su tercer tanto, su vigésimo en el campeonato.
Vermaelen remató al travesaño en el 82.
El Barça aspira a llegar al duelo ante el Atlético de Madrid en la mejor disposición, aunque antes tendrá que viajar el jueves a Las Palmas.
