El problema se suscitó de la Terminal Sur, desde donde siempre se registra una gran cantidad de personas esperando las rutas, al tener que viajar del Sur hacia el Norte, donde se registra mayor actividad tanto en centros labores como en escolares.
El problema permaneció durante al menos una hora, para paulatinamente ir normalizando el tiempo de espera, que cuando empezó operaciones se dijo sería de menos de tres minutos para poder abordar.
Sin embargo, las unidades tardan más en pasar y los usuarios no pueden abordar, porque generalmente van llenas y a decir de los propios ciudadanos e incluso choferes, “la gente no se acopla, se queda en las puertas sin dejar avanzar”.
En las rutas alimentadoras no se ha registrado algún incidente por tardanza, lo que al menos desde una atiborrada estación Zapata del Vivebús puede notarse el contraste, cuando a escasos metros pasan las unidades del Mármol y Dale con bastante espacio.
