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POSIBLE FAMILIA ENTRE LAS VÍCTIMAS; UN MENOR Y 2 MUJERES
El hecho violento más reciente ocurrió hace unos momentos, donde dos grupos de pistoleros se enfrentaron en el Hotel Alfer, ubicado por la Avenida Colon ( A una cuadra de la maquiladora Jhon Deer), con un saldo preliminar de seis muertos, y varios heridos.
El “choque” de narcotraficante ocurrió cuando los tripulantes de una camioneta Ram llegaron a dicho hotel para accionar sus armas contra algunos de sus huéspedes, sin embargo también hubo respuesta de las víctimas, según los primeros informes a www.laparadadigital.com, lo que desató una balacera entre ambos grupos. Según se informa 6 personas murieron en el lugar, una de ellas era mujer.
Uno de los cuerpos estaba en el pasillo del hotel, y el resto en el segundo piso.
Se mencionó que dos hombres lograron huir por el frente del hotel, ubicado en el kilómetro 15 de la carretera a Ciudad Juárez, brincándose una ventana la cual quedó ensangrentada.
Así mismo decenas de unidades policíacas se dirigieron al lugar, donde ubicaron una camioneta Ram con manchas de sangre abandonada, presuntamente donde iban varios sicarios, algunos heridos de bala. Dichos delincuentes, al parecer, abordonaron una camioneta Liberty para huir.
El hecho generó la fuerte movilización de elementos policíacos de distintas corporaciones, tanto al norte como al sur de la ciudad en busca de los agresores.
Personal del Servicio Médico Forense (Semefo) arribó al lugar de los hechos posteriormente para retirar los cuerpos de los occisos y trasladarlos a las instalaciones del C-4, a fin de poder realizar la necropsia de ley correspondiente.
Del mismo modo Periciales de la Fiscalía Zona Centro se encuentran levantando evidencias, entre ellas decenas de casquillos percutidos.
Cabe mencionar que en pasados días fue noticia nacional la entrevista a un jefe de un grupo de sicarios: “La guerra está porque la gente de Sinaloa quiere meter el cristal y no nos vamos a dejar, hay órdenes de hacer lo que sea para no permitir nada de eso. ¿Cómo van a llegar a la casa de uno a querer hacer cosas que no?”, dice Jorge. Su preocupación no tiene una raíz moral, al contrario, es utilitaria, de mercado. Por eso está por comenzar una guerra junto a otros miles de “indios”, miembros de Barrio Azteca, señalaba el delincuente.
