Una pareja originaria de Arizona realizó una apuesta que pronto se viralizó en redes sociales.
Carlos Sánchez, propuso a su esposa que su recién nacido se llamara Gokú, como el protagonista del famoso anime Dragon Ball.
La apuesta consistía en que Carlos debía hacer una publicación y que si esta alcanzaba los mil likes, la esposa cedería ante la petición.
El hombre publicó una fotografía en Facebook en la que aparece con un cartel que dice:
«Mi esposa dijo que si consigo mil likes, puedo llamar a nuestro hijo Gokú».
Carlos no sólo logró la cuota, sino que rebasó el millón de likes en esa red social.