El futbolista más rico del mundo todavía juega para un pequeña nación asiática y nunca ha jugado un partido en primera división.
Su nombre es Faiq Bolkiah, tiene 19 años y uega en las reservas del Leicester. El joven sueña con ser un futbolista profesional pese a que es sobrino y heredero de Hassanal Bolkiah, el Sultán de Brunei, un hombre con una fortuna valorada en $20,000 millones gracias al petróleo y el gas que produce la nación asiática.
El joven, que juega de extremo en el ataque ha pasado por equipos juveniles de Arsenal y Chelsea. Es miembro de la selección nacional en donde ha marcado un gol en nueve partidos.
Su padre es Jefri Bolkiah, un petrolero que también es leyenda deportiva de Brunei ya que practicó el polo.