Audio: Se defiende diputado ‘caliente’

Chihuahua.- Alejandro Gloria, diputado del Partido Verde Ecologista de México, no ha podido dormir tras ser acusado, de manera indirecta, de “caliente” con las asesoras del Congreso del Estado, por lo que este jueves subió a tribuna revivir el caso de acoso sexual.

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Lo anterior, luego que la panista, Carmen Rocío González Alonso, diputada local por el Distrito XVIII de la capital, denunciara el pasado martes en Tribuna que tanto empleadas administrativas como las propias legisladoras son víctimas de acoso.

Ahora, el legislador verde exigió a su compañera panista que interponga la denuncia de manera formal, pues él no anda con esas mañosadas, y de comprobársele, renunciará a su cargo.

El legislador, casado con una diputada federal, indicó ue si él a tenido un comportamiento inadecuado renuncia al cargo y si no que sea la diputada la que lo deje.

En este sentido mencionó que no se pueden hacer declaratorias ante el pleno sin ningún sustento legal, por lo que se solicitará una revisión clara de todos estos acontecimientos y se presente un dictamen en contra o a favor de los diputados.

«Esta declaración abierta nos afecto a los 16 diputados hombres presentes en la sesión, exigiré se haga una revisión ante estos hechos expuestos», señaló Alejandro Gloria.

Cabe mencionar que la acusación de Carmen Rocío González, ocurrió luego de que el diputado del PVEM Alejandro Gloria presentara una iniciativa relacionada con la erradicación la violencia contra las mujeres, toda vez que la diputada dijo que el Congreso “Debía empezar por casa” y evitar que continúen ese tipo de conductas al interior del Poder Legislativo.

“Hay diputados y mucho personal, hombres, que acosan a las mujeres en este Congreso, que mandan flores a las asesoras”, resaltó González, mientras varios legisladores mostraron sonrisas al escucharla, lo que a su vez provocó que la también panista Laura Marín pidiera respeto y acusara que tales risas eran parte de la violencia de género, al denostar una acusación tan seria.

González dijo que había pruebas fehacientes del acoso en contra de sus compañeras, sin embargo sostuvo que no era posible presentarlas pues las victimas temían perder sus empleos.

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